El presente trabajo desarrolla algunas de las diversas formas en que los artistas representaron la fiesta, tomando aquellas obras presentadas a los Salones Nacionales de Bellas Artes en sus primeras cincuenta ediciones. Entre ellas se destaca, por un lado, la relación de estas imágenes con la búsqueda de identidades nacionales y regionales y, por el otro, con las problemáticas del arte moderno del periodo de entreguerras. Formando parte de una investigación mayor, se plantea un esquema provisorio sobre el cual organizar las obras relevadas mediante los ejes sagrado/profano y público/privado.