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Los diversos espacios de enseñanza y aprendizaje en el Taller de Historia de la Arquitectura

Resumen
La Arquitectura como campo disciplinar conlleva preocupaciones intrínsecas, que no pueden ser pensadas como conceptos inmutables, esta es una institución que crea un saber, que establece sus códigos, sanciona reglas, acepta agentes y construye genealogías. En particular, la FAPyD-UNR ha estructurado el curriculum para la enseñanza de la Arquitectura a través del diseño de asignaturas. En el Plan de estudios 2008, estableció que estas debían ser dictadas en el contexto del trabajo en “Taller”. Aquí cabría preguntarse qué rol se le ha asignado a la enseñanza de la “Historia de la Arquitectura” para la formación de un profesional comprometido con su tiempo. Puesto que dar forma a un saber y el impulso de transmitirlo, aparecen como dos momentos de un mismo movimiento. En particular, este “equipo de trabajo” parte de entender que el saber arquitectónico en tanto objeto de estudio de la historia, se conforma a través de una multiplicidad de abordajes, tanto teóricos como prácticos, los que estructuran una compleja red de aprendizajes. En este sentido, la presente comunicación tiene como objetivo dar cuenta de los diversos espacios de enseñanza y aprendizaje que se ponen en juego al interior de “nuestro Taller” de trabajo. Entendido a éste como una asociación de materias que desarrollan una experiencia de enseñanza y aprendizaje teórico-práctico en un ámbito interactivo que involucra a docentes y estudiantes. El mismo está compuesto por tres asignaturas, Historia de la Arquitectura I, II, II más una materia optativa, las cuales posibilitan la secuencia de aprendizajes conceptuales, procedimentales, de investigación y producción. Para realizar estas tareas específicas tenemos en cuenta por un lado que, la Historia de la Arquitectura, no conforma un corpus de cocimientos cerrados, que los alumnos necesariamente deben reproducir memorísticamente. Y además que, los contenidos específicos pueden ir variando año a año en relación a los intereses grupales. Por lo dicho en el párrafo anterior, desde la perspectiva pedagógica, el trabajo en taller es comprendido entonces como un particular sistema de enseñanza aprendizaje, un lugar de elaboración, y transformación de conocimientos, se lo considera una forma de “aprender haciendo”. En particular, concebimos a este espacio como un lugar de “producción de conocimientos”, un territorio compartido de reflexión, puesta en debate, estimulación del juicio crítico y creación de nuevas hipótesis interpretativas. Donde convergen ideas, opiniones, instancias de diálogo, modos de hacer, en relación con objetivos comunes pautados por el “Plan General del Taller”. Y donde los docentes no proporcionamos respuestas únicas ni definitivas y cada tarea se presenta como una nueva posibilidad de investigación y aprendizaje. Esta modalidad de trabajo no implica una simple una sumatoria de materias, sino una lógica de organización interna. Una manera de enseñar, marcada por una cierta flexibilidad de la tarea docente a partir de la rotación y el intercambio de responsabilidades de los mismos dentro del taller, potenciando así la renovación y profundización de la labor específica. También lo entendemos un campo propicio para que tanto los estudiantes como los profesores podamos discutir sobre los problemas, los temas urbanos-arquitectónicos que cada grupo considere más significativo. Potenciando las instancias de aprendizajes entre las distintas materias o niveles, estableciendo intercambios con otras cátedras y/o enriqueciendo la tarea educativa en la vinculación al medio.

Palabras clave

Historia, Arquitectura, Enseñanza

Citación