El presente artículo analiza el periodo comprendido entre finales de la dictadura y las elecciones de 1973. La propuesta pretende abrir un camino de indagación que, recuperando las prácticas sociales, permita ponderar la compleja relación entre el proceso de radicalización política creciente y la apertura democrática como escenario para la ampliación de derechos y de participación política por medio de los canales formales, En esa línea se reflexiona sobre dos instancias diferentes. Por un lado, los modos en que fue pensada la democracia y los posicionamientos que ello exigió a las organizaciones de la nueva izquierda. Por otro, el ejercicio de prácticas políticas que potenciaron un proceso de democratización desde abajo en diferentes espacios.