El discurso humanista de las empresas que alquilan vientres

Tenemos un deseo. Loable. Y gracias a hoy, contamos con el genio de la lámpara que nos mostrará las posibilidades de convertirlo en realidad: Google. Ahí están las perspectivas preferidas entre los modos posibles de pensar este asunto. Por suerte -aunque quizás no sea mera casualidad-, nuestras ansiadas respuestas aparecen entre los primeros puestos. El termómetro de la “maternidad subrogada” marca anuncios de empresas -porque el que paga,encabeza-, en segundo término, las mismas firmas; luego, información sobre la “técnica” y,sobre el final de la página, los tediosos debates en torno a la legislación. Siguiendo el ranking del algoritmo, entramos en el primer sitio que sugiere el Genio: Gestlife, que se presentacomo líder en Argentina en la materia. Nos encontrarnos con la moraleja de la historia, ¡justo esa que queríamos escuchar!: “padres” felices ahora que pudieron concretar su mayor deseo.Lo que desean no es una locura, sino algo que la mayoría puede tener. A ellos la naturaleza les ha fallado, pero no importa, la Ciencia sabe cómo arreglar los desajustes y las empresas posibilitan ese encuentro.