En este escrito nos proponemos abordar algunas cuestiones sustantivas en torno a los procesos de evaluación, con la intención de aportar elementos de análisis y orientaciones, que colaboren con la tarea que las/os docentes están desarrollando en el marco de las aulas virtuales. Partimos de considerar que la enseñanza se está desarrollando en un contexto muy diferente al habitual. Estamos atravesando un proceso social particular que impacta en el entorno escolar y familiar, en nuestros/as estudiantes y en el propio trabajo docente, viéndose afectadas las condiciones básicas tanto para la enseñanza como para los aprendizajes, y para la construcción y sostenimiento del vínculo pedagógico. Sin embargo, ofrecer un espacio escolar aún sin la presencialidad nos conduce a seguir apostando a los procesos de inclusión educativa.